Importancia de la enseñanza de buenos modales para mejorar la convivencia sana de los niños y jóvenes

En el pasado se preocupaban más en las familias y en las escuelas por la enseñanza de los buenos modales y las reglas de etiqueta social que son tan importantes para mejorar la calidad de vida de las personas en lo individual y garantizar su convivencia adecuada en los grupos, todo ello es básico para la buena convivencia y el respeto entre las personas. Se decía mucho aquello de que “aunque alguien se vista de seda y con buena ropa no es nada si no tiene buenos modales” y eso es bien cierto, de que sirve que se vista como un príncipe o un rey si carece de la más mínima educación, por el contrario yo he observado a gente pobre y muy humilde pero que siempre va bien vestida y limpia y que con sus modales y educación parecen verdaderos príncipes o reyes aunque sus ropas sean pobres. No saben cuanta gente he conocido que sufre mucho por carecer de buenos modales y educación. Aunque en la actualidad muchas de éstas reglas han cambiado o se han modificado para adaptarse a la época en que vivimos es muy importante el que tanto en la familia como en la escuela se preocupen por esas reglas básicas de la etiqueta social para evitar que los niños y jóvenes se conviertan en personas inadaptadas socialmente y se sientan aisladas e inhibidas para conseguir buenos trabajos o empleos. No hay que olvidar que con estas simples reglas se logrará más el respeto hacia sí mismo y los que lo rodean. Obviamente, hemos tenido muy malos ejemplos acerca de los buenos modales y la educación, con la difusión de personas obviamente populares a través del internet que no por ser tan importantes demuestran buena educación. Definitivamente, tanto los artistas, los políticos e incluso los presidentes no son un excelente ejemplo de educación y buenos modales aunque sean bastante conocidos y tengan un alto nivel de popularidad. Por eso mismo es importante el que en las escuelas se les enseñe a los niños y jóvenes los buenos modos para comer, para vestirse, para convivir y desenvolverse en sociedad. Obviamente hay reglas de etiqueta básicas como son la higiene, el vestido y la forma de alimentarse tanto en casa como en restaurantes y cenas elegantes. No sólo es saber dar las gracias cuando se recibe algo, es el pedir permiso, el saber decir por favor, el ceder el asiento en los transportes a las personas mayores, embarazadas, enfermas o con alguna discapacidad física, el saber ceder el paso a las personas para no estorbar su camino, el abrir las puertas de los restaurantes a las damas y a las personas mayores, el ayudar a cocinar y saber comer correctamente utilizando los cubiertos adecuados, el comer con mesura y dejar los platos lo más limpios posibles para ahorrar trabajo a la hora de su limpieza, el colaborar para recoger las mesas después de comer, y lo mismo para lavar platos y hacer cualquier tarea o quehacer del hogar que aligere un poco la carga de la mamá. El saber controlarse y sonreir aunque se esté enojado (como dice el dicho “a mal tiempo buena cara”), el saber respetar a los demás para que ellos te respeten a ti, etc. Obviamente, eso también ayuda a eludir problemas porque las personas bien educadas obviamente eludirán el trato con las personas que no tienen nada de educación. En estos tiempos hay que ser más democráticos, nadie es sirviente de nadie, todos vivimos mejor si colaboramos para el logro de objetivos que nos beneficien a todos. Si todos colaboramos en armonía, con tolerancia y respeto todos ganamos algo ya sea la satisfacción o el bienestar común.

Supervisión del actuar correcto de los alumnos en patios durante los tiempos de descanso y en los baños para evitar el bullying, las peleas y las travesuras.

En todas las escuelas y en todos los tiempos siempre han existido en las alumnos con serios problemas de conducta, los cuales requieren más supervisión de la normal sobre todo para evitar que con su actuar afecten a sus compañeros. No hay que darles facilidades, hay que supervisarlos más, estos niños y jóvenes siempre buscan la oportunidad para actuar mal y hacer travesura

s, ya sea por un descuido de sus profesores, o bien aprovechan los tiempos de recreo o los sanitarios de las escuelas. Por ese motivo es muy importante que dentro de la escuela se les supervise y controle mejor no sólo dentro del aula, también en los tiempos de recreo o descanso y cuando van a los sanitarios, hay que prevenir las malas acciones, hay que educarlos más, no basta con la buena intención del profesor para supervisarlos y controlarlos dentro del aula, los alumnos necesitan más control y supervisión sobre todo en patios en los tiempos de recreo y cuando acuden a los sanitarios de forma individual o grupal. No podemos olvidar que muchas veces es en los sanitarios donde los chicos y chicas que saben fumar o beber alcohol aprovechan para hacerlo y ‘enseñar a sus compañeros a hacerlo’ porque se sienten con libertad de tener mala conducta en ese sitio porque están sin supervisión y también es ahí donde a veces se reúnen en grupo para ‘atacar cobardemente y en bola a un compañero indefenso’. Por esa razón aclaro que además de la excelente labor que realiza el maestro para supervisar y controlar a sus alumnos durante el tiempo de clases, la escuela debe brindar el apoyo a través de prefectos y prefectas para supervisar y controlar el actuar correcto del alumno en los patios, al ingresar y salir de la escuela y durante los recreos y además debe haber personas encargadas de vigilar la conducta de los alumnos en los baños y sanitarios. Ahí en baños y patios es donde se debe además de supervisar y controlar colocar letreros para motivar a los alumnos a tener buena conducta y llevar una vida sana libre de adicciones y la persona que controla el sanitario debe de vigilar que estén limpios y aseados, y que no falte el jabón y el papel del baño pero al mismo tiempo debe estar autorizada para activar alarmas, timbres y alertas en caso de que observe alguna conducta sospechosa de los alumnos en el sanitario. Muchas personas me dicen que en las escuelas públicas eso no se hace porque no hay recursos suficientes para llevarlo a cabo, pero yo creo que debe buscarse la forma de implementar este tipo de seguridad en estos tiempos difíciles para evitar el bullying y los problemas de conducta y adicciones entre la niñez y la juventud y quizás se pudiera solicitar el apoyo de los padres de familia para lograr esto ya sea organizándose para llevar a cabo la labor de forma personal o bien cooperando de alguna otra forma para garantizar la seguridad y el bienestar de sus hijos durante su estancia en la escuela para que se puedan concentrar mejor en sus estudios y aprendizaje que es lo que más importa. En todos lados se puede educar al alumno, en las escuelas pobres podrían enseñar reglas de higiene en los baños a los alumnos, y si no cuentan con recursos para contratar personas que limpien los sanitarios podrían poner un botecito de detergente, un botecito de cloro y un cepillo para el sanitario con su portacepillo y con un letrerito decirle al alumno que haga la limpieza del sanitario si es que lo dejó sucio. También se les pueden poner letreros para que se laven las manos después de ir al baño, etc. No podemos olvidar que el alumno bien educado repetirá estas acciones de higiene en su propia casa y eso ayudará a prevenir enfermedades.

Es mejor y más divertido aprender a leer y escribir correctamente leyendo cuentos, fábulas y narraciones bonitas

Que difícil resulta ahora para los niños aprender correctamente ortografía, redacción y literatura, todo ello debido a las faltas de ortografía y errores en la impresión de los libros de texto gratuitos y al uso de las herramientas del e-learning y el internet, los twits y mensajes de Facebook son fatales en el aspecto de ortografía y redacción. Por eso para los padres que se preocupan por darles una buena educación a sus hijos, es más conveniente el formar una pequeña biblioteca infantil real para que los niños aprendan mejor, si los textos gratuitos tienen errores ortográficos y de redacción, los padres pueden procurar adquirir textos de literatura y ortografía infantil bien revisados para la biblioteca infantil de sus pequeños, también pueden completar con una enciclopedia real, buenos diccionarios y agregar también textos de apoyo para las matemáticas, la física y la química y enseñarles a utilizar estos suplementos educativos como se hacía antes, además de las herramientas del internet y el e-learning. Si los padres tienen varios hijos que mejor porque la pequeña biblioteca infantil les servirá a todos ellos, también se les puede educar a cuidar los libros, y agregar algunos rompecabezas y textos para leer cuentos y colorear. Siempre es posible tener unos cuantos libreros pequeños para guardar en orden la biblioteca real y agregar algunas nuevas adquisiciones a la misma para beneficio y diversión de los chicos. También si se quiere agregar herramientas modernas puede agregarse un escritorio con una laptop, ipads o nuevas tecnologías, pero hay que estimular a los niños a crear y redactar sus propios escritos y no sólo consultar, bajar y pegar información sin leer los contenidos. Enseñarles que lo que ellos redactan, resumen y elaboran por si mismos es mucho mejor que el copy y paste de archivos ya escritos por otros, porque los chicos que entregan ese tipo de trabajos muchas veces ni siquiera leen los contenidos que están copiando y pegando y que ese tipo de tareas no valen y son trampa porque así no se estudia. Además de todo, podría ser bonito para los papás el conservar de recuerdo algunos de los cuadernos con las primeras letras de sus hijos. Para como está de politizada la educación en México es mejor que los papás que se preocupen por el bienestar y el futuro de sus hijos les den una ayudadita a través de este tipo de bibliotecas infantiles en donde se divierten, aprenden jugando y perfeccionan sus habilidades para la ortografía y redacción, además de disfrutar los cuentos infantiles escritos por personas que amaban a los niños como Hans Christian Andersen, Perrault, etc. Ojo, es importante nunca olvidar el cuestionar al pequeño acerca de lo que leyó, después de dejarlo leyendo un texto, cuando les digan que ya terminaron de leerlo, los padres tienen que dedicar tiempo a ellos, preguntándoles de que trataba el cuento que leyeron y escuchando con atención sus explicaciones y si no se acuerdan hay que decirles que entonces no han leído bien puesto que no se acuerdan de lo leído pidiéndoles que pongan más atención a los contenidos de lo que leen porque eso es muy importante. Otra opción es ponerlos a leer en voz alta el texto y después cerrarlo y pedirles que expliquen en sus propias palabras lo que han comprendido del cuento que acaban de leer. No olvidar siempre cuestionarlos acerca de lo leído y aprendido para que desarrollen las habilidades necesarias para retener y captar la información, además de redactar en sus propias palabras lo que han comprendido. Y también hay que animarlos a colorear algunos cuadernos, armar rompecabezas, resolver crucigramas, adivinanzas, chistes, trabalenguas, etc. Después de todo los cuentos, historias cortas y fábulas son también buenas para la educación.